El pasado 20 de marzo pude asistir a la segunda parte del curso Espiritualidad en Misión, a cargo de Francisco Berbegal (Paco). Aunque las circunstancias obligan y la morriña de otros tiempos no tan lejanos en los que podíamos compartir el mismo espacio y abrazarnos me entristece un poco, es más fuerte la alegría que produce el compartir con más de treinta compañeros misevis una jornada más de formación.
Como todos los buenos momentos, se me hizo corto, pero me sirvió porque pude disfrutar y aprovechar los suficiente para entender lo que Paco nos dijo: que la Misión hay que vivirla con radicalidad, porque nuestro ser y estar en el mundo solo puede entenderse desde una disposición total al servicio del prójimo, evangelizando y dejándonos hacer lo propio, sin imposturas.
Doy gracias a Dios por poner a mi alcance este carisma vicenciano y a tantas personas dispuestas a compartir la experiencia de Fe y la espiritualidad que nos caracteriza como miembros de MISEVI. Os animo a compartir con nosotros estas sesiones formativas y a buscar en estos encuentros la manera de seguir haciendo de nuestra vida un camino misionero
Un saludo fraterno.
Jesús Díaz Herrera
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